Los mejores trajes de neopreno para niños del 2025

El SEAC Dolphin es ideal para peques que llevan los primeros chapuzones en la piscina o empiezan a explorar el mar con sus padres. Su diseño en negro/azul y neopreno de 1.5 mm combinado con mangas de lycra elástica asegura comodidad y libertad de movimiento, sin agobiar. Lo bueno es que la cremallera frontal facilita que los niños se lo puedan quitar y poner sin tanta lucha, que ya sabemos que eso es un poco batalla familiar en cada salida. Además, el neopreno protege del frío y, lo que me parece clave, la lycra cubre del sol al 100%, así que evitas sustillos de quemaduras mientras juegan o hacen snorkel. SEAC es una marca con bastante tradición en esto, lo que da confianza en la calidad y durabilidad. Para unos niños de 7 años que quieren disfrutar del agua sin líos, puede encajar muy bien. No es un traje súper técnico, pero sí práctico y bien pensado para los niños.

Este traje de neopreno TaimeiMao en color Liebre-S está pensado para niños entre 14 y 18 kg, ideal para esos días en los que los peques se tiran a la piscina, playa o parque acuático. Su tela de 2,5 mm de grosor es bastante ligera pero aporta un buen aislamiento para que no pasen frío en el agua, además protege del sol, algo que siempre viene bien cuando están horas jugando. Una ventaja práctica es la cremallera trasera con solapa interior, que facilita poner y quitar el traje sin dañarse ni molestar. Aunque puede quedar un poco justo al principio, eso es normal en neoprenos para que ajusten bien y mantengan el calor. Dando por hecho que resiste bastante para primeros chapuzones, parece un producto confiable que cumple con lo que promete. No está mal para quienes buscan algo sencillo y eficaz para sus niños.

El traje de baño de Gogokids en Turquoise está pensado para esos peques a los que les encanta pasarse horas en el agua y que necesitan una protección extra. Ideal para deportes acuáticos como el snorkel o el surf, su neopreno de 2,5 mm consigue que los niños no pasen frío y evita las molestas picaduras de medusas, algo que siempre está bien tener controlado en verano. Además, la protección UV 50+ es un puntazo para evitar quemaduras, sobre todo con tanta exposición al sol. Un detalle que me parece bastante práctico es la cremallera trasera con la correa extralarga; facilita mucho que los niños se puedan poner y quitar el traje sin que los padres tengan que estar pendientes. Eso sí, la primera vez puede quedar un poco justo en seco, pero en cuanto se mojara, seguro que se adapta mejor. En resumen, parece un accesorio pensado para que los niños disfruten del agua sin complicaciones y con comodidad.