Los mejores patinetes de saltos del 2025

El patinete Aragallant en Blue es perfecto para quienes quieren iniciarse en el mundo de las acrobacias o para los que disfrutan haciendo trucos en skate parks o halfpipes. El diseño robusto del manillar y los mangos acolchados facilitan mantener el control y absorben bien los impactos, algo clave para no acabar con las manos doloridas después de varios intentos. Además, aguanta usuarios de hasta 100kg , lo que añade seguridad si buscas algo duradero. Otra cosa que mola es que las ruedas de PU son flexibles pero resistentes, así que no hay que preocuparse demasiado por el desgaste o por aterrizajes fuertes. Montarlo rápido es un plus, con solo dos tornillos te lo montas listo para la acción. En definitiva, parece un patinete que cumple justo con lo que esperan los que quieren probar freestyle sin complicaciones.

Este Schildkröt Patinete de Acrobacias Untwist está pensado para quienes ya tienen algo de experiencia con trucos y buscan un patinete que aguante bien el desgaste de saltos y acrobacias. Si sueles practicar en parques o zonas urbanas, su estructura de aluminio reforzado te da confianza porque combina ligereza con resistencia, algo que no cualquier patinete ofrece sin volverse pesado. Además, siendo bastante compacto ( 50.8 cms de alto x 63.5 cms de largo x 10.16 cms de ancho ) y ligero ( 3.15 kg ),es fácil de manejar y transportar. Lo que me parece clave es el manillar giratorio 360º, que hace los giros y trucos mucho más fluidos sin que te líes con el cableado o el balanceo incómodo. También las ruedas de PU de 100 mm se llevan muy bien con cualquier tipo de superficie, absorbiendo golpes y manteniendo el control cuando caes en salto. Por lo que he leído, la marca Schildkröt respalda bien su producto con una garantía de 2 años , y eso es un plus para no preocuparte por pequeñas roturas al principio. Si buscas algo robusto pero ágil para progresar, este patinete puede ser justo lo que necesitas.

El patinete Land Surfer en Negro Llama está pensado para chavales entre 8 y 12 años que quieren empezar a hacer trucos o incluso para los que ya tienen algo de nivel. Su tamaño, con unas medidas de 81.28 cms de alto x 66.04 cms de largo x 48.26 cms de ancho, resulta bastante manejable para los peques, y pesa solo 3.15 kg, así que no es un peso muerto para llevar de aquí para allá. Además, el montaje es super sencillo, solo hay que encajar manillar y base, perfecto para no complicarse la vida.

Lo interesante es que su estructura es de acero robusto, lo que da confianza a la hora de lanzarse a hacer saltos o trucos sin miedo a que el patinete se rompa. Las ruedas de poliuretano de 100mm ayudan bastante con la estabilidad y también con amortiguar al aterrizar, algo clave para que la experiencia no sea un constante desastre de caídas duras. En definitiva, tiene pinta de ser un patinete que aguanta el ritmo de los críos activos y les permite progresar sin complicaciones. Si buscas algo fiable para que el niño dé sus primeros pasos en el mundo freestyle, este podría encajar bastante bien.