Los mejores guardabarros de bicicleta del 2025

Para quienes suelen salir con la bicicleta por caminos de tierra o ciudades con clima cambiante, el guardabarros Hotype es un accesorio bastante práctico. Sirve tanto para ruedas delanteras como traseras y para bicicletas con llantas de entre 20 y 26 pulgadas, así que cubre un buen rango para bicicletas MTB o urbanas. Además, viene de dos en dos, lo que resulta cómodo para proteger ambas ruedas sin tener que buscar aparte.

Lo que me convence es su diseño con semicírculo más ancho, que parece evitar bien que te salpiquen barro o agua mientras pedaleas, manteniéndote más seco. También se agradece que su instalación sea sencilla y ajustable, porque nadie quiere complicarse con herramientas raras. El material aparenta ser resistente, así que no me extrañaría que aguante bastante sin romperse. En resumen, si no quieres acabar hecho un cuadro de barro, estos guardabarros pintan bien para la aventura diaria.

Para quienes suelen moverse en bici por ciudad o caminos con barro y lluvia, estos guardabarros de Bymivofun pueden venir bastante bien. Lo que me parece práctico es que tienen cuatro orificios ajustables, así que encajan en diferentes tipos de horquillas y tirantes, y además traen dos líneas de corte que ayudan a evitar que te salpiques toda la mierda en las piernas y la bici. Eso se agradece cuando no quieres andar limpiándola a cada rato.

Otra cosa que pinta bien es el material flexible y resistente al sol que usan, que aguanta sin romperse aunque lo dobles varias veces; eso no siempre es fácil de encontrar en accesorios baratos. Además, el patrón de fibra de carbono 3D le da un toque moderno y nada básico, por si también te importa cómo queda visualmente. En resumen, parece un producto que cumple sin complicaciones y con un diseño cuidado, ideal si buscas algo práctico y duradero para no acabar hecho un desastre después de cada ruta.

Para quienes suelen salir en bici de montaña y no quieren acabar llenos de barro o salpicaduras, el guardabarros Waflyer en negro va bastante bien. Está pensado para ruedas de entre 24 y 29 pulgadas, así que encaja en la mayoría de bicicletas normales, incluso si tienes frenos en V, que a veces complican la cosa. Lo cómodo es que su diseño en forma de medio círculo es más ancho de lo habitual, lo que ayuda a que te llegue menos barro y agua a la ropa y la bici. Además, la instalación parece súper rápida y sencilla, montarlo o desmontarlo no debería darte líos, gracias a los accesorios que trae. El material de PVC es resistente pero flexible, así que aguantará bien los golpes típicos de rutas en terrenos irregulares. Si buscas algo práctico para no preocupate tanto por la lluvia o los caminos embarrados, este guardabarros parece un buen complemento para ir más tranquilo sin líos de salpicaduras.