Las mejores bicicletas de montaña eléctricas del 2025

La Cecotec Bicicleta Eléctrica de Montaña en azul es perfecta para quienes disfrutan de rutas largas y terreno variado, especialmente si te gusta combinar aventura con un poco de ayuda para no llegar agotado. Su batería de 360 Wh ofrece hasta 55 km de autonomía, lo que la hace ideal para salir de casa sin estar pendiente del cargador, sobre todo en caminos donde no hay muchas opciones para detenerse a recargar.

Una característica que me parece muy útil es la suspensión delantera, que ayuda a suavizar baches y piedras, así no te das con cada irregularidad del terreno. Además, el sistema de doble freno de disco hidráulico aporta seguridad, algo imprescindible cuando estás bajando por zonas complicadas. El cuadro de aluminio es otro punto a favor porque combina resistencia con ligereza, facilitando los desplazamientos sin sentir que llevas un ladrillo. En resumen, tiene pinta de aguantar bien el ritmo y el trote que exige el monte sin complicarte la vida.

La bicicleta eléctrica OneSportWay DUOTTS C29 en negro tiene un diseño robusto y unas dimensiones de 111.76 cms de alto x 182.88 cms de largo x 71.12 cms de ancho, ideal si te mueves por ciudad o te animas a rutas algo más exigentes. Su peso de 26.1 kg no es ligero, pero es manejable gracias a las 21 velocidades y los neumáticos de 29" resistentes a pinchazos, que ayudan a afrontar cualquier tipo de terreno sin complicaciones.

Lo que me convence especialmente es la batería de 48V 15Ah, que da para entre 80 y 100 km con asistencia de pedaleo, así que no tienes que estar pendiente constantemente de recargarla en salidas largas. Además, el motor de 250 W permite subir cuestas sin quedarse corto y alcanzar hasta 25 km/h (15,5 mph),suficiente para un paseo rápido o desplazamientos diarios. Con 1 año de garantía del fabricante, parece una apuesta segura si buscas algo resistente y cómodo sin complicarte demasiado.

El soporte de suelo para bicicleta de montaña de KESSER es justo lo que le puede venir bien a cualquiera que se mueva mucho con la bici, sobre todo si te gusta hacer rutas o escapadas y necesitas algo ligero y práctico para aparcarla sin complicaciones. Tiene un peso de solo 1,8 kg y un diseño desmontable que facilita montarlo y transportarlo sin que te suponga un estorbo. Además, las patas antideslizantes no solo mantienen la bici estable sino que también cuidan el suelo, algo que se agradece si lo usas en casa o en el garaje.

Otra ventaja que me parece útil es que incluye una bomba de aire extra, así siempre la tienes a mano para mantener la bici en forma sin ir cargado con herramientas por separado. Funciona bien para neumáticos de tamaños amplios, hasta 27,5 pulgadas y anchos de hasta 6,5 cm, por lo que es compatible con la mayoría de las bicis de montaña. En definitiva, parece un accesorio práctico que facilita ese momento de parar, ajustar o revisar la bici sin líos.