Los mejores pulsómetros del 2025

Para quien se lo toma en serio y quiere controlar bien el pulso durante sus entrenos, el GEOID HS500 es un pulsómetro de correa ideal. Es perfecto para correr, ciclismo o fútbol, gracias a su precisión comprobada y la conexión ANT+/Bluetooth que hace fácil enlazarlo con casi cualquier dispositivo. Aunque no valga para la piscina, fuera del agua se sigue bien el ritmo para evitar pasarse de fuerza y quemar nervios de más. Lo que me llama la atención es esa batería que dura un montón, hasta 800 horas, o sea que no tienes que estar recargando cada poco. El diseño es fino y cómodo, con una luz LED que te avisa de que va todo correcto, lo que ayuda a no desconcentrarte mientras haces ejercicio. Si buscas un pulso fiable sin complicarte, este modelo en negro cumple bien y parece pensado para durar.

Para quien lleva una vida activa, ya sea corriendo, haciendo yoga o metiéndose en sesiones de fitness, el iGPSPORT HR40 puede ser un compañero bastante útil. Su diseño con banda elástica ajustable es cómodo y se adapta a distintos tamaños de pecho, desde 65 hasta 120 cm, así que no te tendrás que preocupar por que apriete o se mueva demasiado. Además, la certificación impermeable IPX7 significa que no hay drama si sudas mucho o te llueve un poco en medio del entrenamiento. Por otro lado, la combinación del módulo dual BLE/Ant+ y la tecnología para medir con precisión la frecuencia cardíaca promete datos fiables, lo que es clave para entrenar bien sin pasarse ni quedarse corto. La batería aguanta hasta 1200 horas, algo que seguro gusta a quien no quiere estar pendiente de cargarlo cada dos por tres. En definitiva, parece un producto pensado para quienes buscan calidad sin complicarse y que se adapta a varios deportes, así que puede merecer la pena echarle un vistazo si quieres algo práctico y duradero.

Este pulsómetro multifunción de Bodyline en negro es perfecto para los que se toman en serio el deporte, ya sea correr, pedalear o incluso hacer ejercicio en casa. La banda ajustable lo hace súper cómodo y adaptable a cualquier tamaño, lo que evita esos momentos en los que tienes que andar apretando o recolocando el cacharro cada dos por tres. Además, con un tamaño de 12.7 cms de alto x 5.08 cms de largo x 15.24 cms de ancho , no es ni muy grande ni muy pequeño, algo que se agradece para llevártelo puesto sin molestarte. Lo que realmente me parece útil es el contador de calorías y el monitor de frecuencia cardíaca: son dos funciones que te ayudan a controlar lo que haces y no pasar de frenada sin darte cuenta. Y el cronógrafo viene bien para cronometrar entrenos o intervalos sin complicaciones. Tiene también una garantía del fabricante de 2 años , lo que da algo de tranquilidad si te preocupa la durabilidad. En resumen, más que un capricho, parece una herramienta práctica para quien quiera estar en forma sin complicarse.