Los mejores pies de gatos del 2025

Los pies de gato Boreal 61308 en Amarillo son una opción interesante para quien practica escalada técnica, sobre todo si te gusta meterte en rutas con desplomes exigentes. Su horma muy asimétrica está diseñada para ajustarse bien, pero sin pasarse de incómoda, algo que puede marcar la diferencia cuando llevas horas en la pared y necesitas precisión sin sacrificar un mínimo de confort. Además, la flexibilidad que ofrecen facilita moverse en vías complicadas, ayudando a que el pie se amolde mejor a las presas irregulares. Esto puede hacer que la técnica mejore sin que te duelan tanto los pies después de una sesión intensa. Aunque no tengo experiencia directa con ellos, la combinación de estas características parece pensada para que la escalada sea más ágil y controlada. Si buscas algo que rinda en terreno técnico sin resignar comodidad, estos pies de gato merecen la pena.

Para quienes están empezando en la escalada, el pie de gato Boreal 62188 puede ser justo lo que necesitan. Su horma ancha y el material sintético ayudan a que no apriete demasiado el pie, algo bastante habitual en modelos más técnicos que a veces resultan incómodos para novatos. Además, al ser muy transpirable, da menos sensación de calor y sudor, lo que se agradece en sesiones largas o en lugares calurosos. El diseño sencillo pero efectivo hace que resulte fácil adaptarse y ganar confianza en movimientos básicos sin la incomodidad de un pie demasiado riguroso. Si estás buscando algo funcional para iniciarte y no quieres invertir mucho en un pie de gato con prestaciones muy avanzadas, este modelo multicolor cumple bastante bien con lo que promete. No será para escaladores top, pero para aprender y disfrutar, parece un buen aliado.

El pie de gato Boreal 62173 está pensado para quienes están empezando en la escalada o buscan algo cómodo para rutas poco técnicas. Su horma ancha y el material sintético lo hacen bastante adaptable, ideal para pies que no son precisamente finos. Además, es bastante transpirable, lo que ayuda a que el pie no se caliente tanto durante la actividad, algo que siempre se agradece en escaladas largas o en días calurosos. Lo que me parece práctico es que, aunque esté diseñado para principiantes, no sacrifica la comodidad ni la durabilidad, que suelen ser problemas comunes en este tipo de calzado. No es un zapato para performance extrema, pero cumple bien para quien sube vías moderadas y quiere algo que no apriete ni moleste. Por lo que he leído, si buscas algo sencillo que haga la escalada más accesible sin complicarte demasiado, este pie de gato puede encajar muy bien.