Las mejores bicicletas con suspensión del 2025

Si te mola la montaña y buscas una bici que aguante bien los caminos de tierra y los baches, la Bounty con suspensión total puede encajar. Está pensada para quienes disfrutan de rutas algo exigentes y necesitan cambiar rápido de marchas sin complicaciones, gracias al sistema Shimano de 18 velocidades. Además, la suspensión completa y la horquilla Zoom facilitan mucho absorber los golpes, así que irás más cómodo incluso en senderos irregulares. La bici viene casi lista para salir, solo falta ajustar unos detalles, lo que se agradece para no quebrarse la cabeza con el montaje. Otro punto que me parece práctico son los frenos de disco de aleación; garantizan que pares bien aunque el suelo esté mojado, algo fundamental si sueles pedalear con tiempo variable. Por su diseño robusto y el equipamiento que trae, es una opción que transmite confianza para usarla en rutas variadas. No será la más ligera del mercado, pero para lo que ofrece, parece un buen complemento para quienes quieren practicar montaña sin complicarse la vida.

Si tienes un hijo o sobrino que ya empieza a controlar bien la bici y pasa de la clásica de 20 pulgadas, esta HH HILAND Climber de 24 pulgadas en Negro puede venirle genial. Está pensada para niños desde 9 años y unos 135 cm, justo cuando empiezan a querer más autonomía y enfrentarse a terrenos variados, ya sea el parque o algún sendero leve. La horquilla de suspensión y el cuadro de acero de alto carbono, más bajo para facilitar los movimientos, hacen que sea bastante cómoda y segura para ellos. Lo que me parece muy práctico es el sistema de 7 marchas con cambios de agarre: permite adaptar la bici fácilmente según la ruta o el cansancio del pequeño, sin complicaciones. Además, los frenos Vbrake dan confianza, porque se nota que paran bien cuando toca. Teniendo en cuenta que viene 85% montada, la instalación no debería ser un lío para nadie con un poco de maña. Para un niño que quiere empezar a explorar fuera del asfalto, parece que esta bici pone las cosas fáciles sin demasiadas florituras.

Si tienes un kayak y te falta espacio en el garaje, este sistema de elevación de VIVOHOME puede venirte de perlas. Está pensado para colgar tu kayak del techo sin complicaciones, así evitas que ocupe sitio en el suelo y lo tienes a mano cuando lo necesites. Además, al poder subir hasta 10 pies, es ideal para techos altos y otros objetos grandes que quieras guardar sin miedo a que se caigan. Lo que mola es su sistema de poleas con cuerda, que hace que subir y bajar el kayak sea más sencillo y sin hacer fuerza. También trae un cierre de seguridad que da tranquilidad porque no tendrás que estar pendiente de que se suelte. Los ganchos recubiertos protegen el kayak de arañazos y la cuerda es resistente, lo que sugiere que aguanta bien el peso. Por todo esto, parece un aparato bastante práctico para quien quiere aprovechar mejor el espacio con algo seguro y duradero.